Arturo Vega Zaldívar
“Los alumnos aprendieron, no sólo a desarrollar objetos, sino también a establecer una práctica social que requiere de instrumentos de investigación para poder realizarla y eso es una novedad, es algo nuevo que diseñadores incursionen en un campo que no conocían y con el apoyo de la División de Ciencias Básicas e Ingeniería (CBI) y sus profesores-investigadores hemos logrado desarrollar los productos”, expresó el profesor Fernando Shultz Morales durante la presentación pública de los proyectos terminal de los alumnos del grupo Desarrollo Integral de Productos de la Licenciatura en Diseño Industrial y realizada en el auditorio W-001 de la unidad Azcapotzalco.
El catedrático, nacido en Chile y radicado en México después del golpe de estado al presidente Salvador Allende, agregó que es un “acto académico que indica el término de una etapa en la vida de un grupo de estudiantes de la carrera en Diseño Industrial; ellos organizan el evento con el fin de agradecer a sus familiares el apoyo recibido durante cuatro o más años y a la universidad por haberles entregado el conocimiento que han adquirido”.
Después del mensaje del profesor Shultz Morales, los alumnos, agrupados en cuatro equipos y ante sus familiares, profesores, coordinadores y director de la División de Ciencias y Artes para el Diseño (CyAD), expusieron los productos diseñados y materializados para después donarlos al Laboratorio de Tecnologías Sustentables de la División de CBI.
El diseño de equipo científico para la recolección, análisis, almacenamiento y transporte de microplásticos muestreados en playas y cuerpos hídricos fue expuesto por el equipo integrado por Ana Belén Vázquez Ugalde, Luis Daniel Garrido Herrera y Eduardo Aguilar Rubio.
El sistema diseñado lo integran tres productos: Red captadora, tamiz y mochila de transporte que, en conjunto, propician que las investigaciones puedan realizarse de manera fácil y precisa a través de instrumentos asequibles y viables de producir y reproducir.
El captador es un dispositivo diseñado para el muestreo en cuerpos de agua, en el que, a través de una red, recoge los microplásticos al ser lanzada y remolcada por la lateral de un vehículo motorizado recorriendo una distancia y velocidad previamente determinada. Conforme avanza el dispositivo, los microplásticos ingresan a través de la malla y el movimiento de entrada de agua permite que estos sean depositados en el tubo de ensayo.
El tamiz es una herramienta para extraer arena de playas y tierra de lagunas, ríos y demás cuerpos hídricos que contienen microplásticos. La forma y uso del tamiz se adaptó al modelo de recolección propuesto por los investigadores del laboratorio y las dimensiones del mismo se ajustaron para obtener en promedio tres kilogramos de arena o tierra en cada muestreo.
La mochila se diseñó para transportar y almacenar el equipo captador, tamices, frascos, botes y tubos de ensayo para los microplásticos recolectados en cuerpos hídricos y playas.
El equipo integrado por Jazmín Arteaga Rivero, Carolina Gavilán Cureño, Diana Mosqueda Ortiz y André Vargas Rodríguez, después de un proceso de observación, investigación y análisis en el Laboratorio de Tecnologías Sustentables detectó que falta un contenedor especial para lombricomposta (abono natural producido por la degradación y descomposición de desechos orgánicos usando lombrices); no hay recolección de lixiviados (líquidos producidos durante la descomposición de materia orgánica, de olor desagradable, pero son excelentes abonos); tiene dificultad para separar lombrices y carecen de almacenamiento de lombricomposta.
La propuesta de diseño industrial que desarrollaron se titula LOMCO (Lombricompostador con recolector de lixiviados) y está integrada por un contenedor con cajones divisores, tapas, filtro y recipiente recolector de lixiviados. Son cajas apilables con capacidad de ocho litros por cajón divisor y 800 mililitros en el cajón para lixiviados.
El diseño y desarrollo de un Sistema-contenedor para el estudio de microplásticos en lombrices fue expuesto por Ximena Echeverría Martínez, Edith Peñafiel Hernández, Alma Buendía Torres y Michael Doherty Sousa
En el Laboratorio de Tecnologías Sustentables se desarrollan investigaciones con lombrices para determinar los impactos que tienen los microplásticos en dichos organismos, sin embargo, los estudios se realizan con instrumentos que no cumplen con los requerimientos deseados, tanto en función como en uso, lo cual puede afectar la efectividad y veracidad de las pruebas.
Además, los alumnos identificaron que en el mercado no existe un producto que este diseñado específicamente para este fin, por lo cual se propusieron diseñar una solución y desarrollaron un diseño integrado por tres subsistemas que denominaron contenedor individual, manipulación y organización y contenedor exterior.
El contenedor individual es transparente para permitir observar las pruebas durante el proceso de estudio, su forma curva evita la acumulación de residuos y facilita la limpieza; tiene volumen suficiente para que las lombrices no se constriñan y está hecho de vidrio para evitar la contaminación de las pruebas.
Manipulación y organización, términos utilizados para referirse a la canastilla que cubre y soporta al contenedor individual conectando con los demás componentes y para mantener las pruebas ordenadas y estables.
El contenedor exterior evita la entrada de luz, mantiene niveles de temperatura y humedad; tiene tapa corrediza que permite la optimización del espacio; cuenta con orificios de ventilación cubiertos con malla para permitir la correcta oxigenación de las pruebas y evitar el paso de insectos.
El producto se elaboró con materiales amigables con el medio ambiente: el vidrio de los contenedores es reciclable, el contenedor externo se elaboró con HDPE reciclado, las canastillas se imprimieron en 3D y el plástico utilizado proviene de fuentes renovables y compostables en condiciones adecuadas. El proceso de impresión en 3D permite reemplazar por el usuario las piezas dañadas o desgastadas para prolongar la vida útil del producto.
Makoe es el título del proyecto que integra un sistema de mobiliario para eficientar las actividades en el Laboratorio de Arboricultura de la División de CBI de la unidad Azcapotzalco y diseñado por el equipo conformado por Aranza Fonseca Romero, Miriam Hernández Caballero, Andrea Pacheco Jiménez, Paulina Vargas Castañeda y Eleazar Avilés Castelazo.
Durante la exposición de Makoe, sus creadores expresaron: “Nuestro deber como diseñadores es aportar un producto que apoye a los investigadores para desarrollar sus prácticas de la manera más óptima”, para lo cual tuvieron que conocer los antecedentes, analizar las actividades que se realizan en el sitio y detectar necesidades.
Como resultado del proceso de investigación y análisis identificaron que el invernadero no cuenta con las condiciones adecuadas para las tareas que realizan y eso afecta el cuidado de las plantas y posibles riesgos en la salud de los colaboradores.
Después del diagnóstico, establecieron los objetivos generales del proyecto, entre ellos, diseñar equipo que sirva para una mejor distribución del espacio dentro del invernadero y reduzca los potenciales riesgos físicos que conllevan las actividades de los usuarios.
La propuesta de diseño desarrollada consiste en un sistema de mobiliario conformado por cinco mesas modulares para diferentes actividades que permitan una óptima organización y distribución del espacio para mejorar la experiencia del trabajo. El mobiliario está integrado por un módulo de servicio, mesa móvil esquinera con tres charolas, módulo de trabajo, modulo tamizado y modulo para transportar plantas de gran crecimiento que requieren de monitoreo y traslado, además es útil para realizar trabajos que demandan de esfuerzos físicos mayores por parte de los colaboradores.
El proyecto de diseño industrial integró materiales que se caracterizan por su durabilidad y resistencia, es un diseño ergonómico y versátil, algunas partes del mobiliario se elaboraron con materiales reciclables y las piezas comerciales son reemplazables.
Después de la exposición pública, los hoy egresados de la licenciatura en Diseño Industrial recibieron reconocimientos y el director de la División de CyAD, Mtro. Salvador Ulises Islas Barajas, entregó de forma simbólica, al Dr. Juan Carlos Álvarez Zeferino y a la Mtra. en C. Areli Cruz Salas los prototipos que contribuirán a mejorar las condiciones y los resultados de las investigaciones en el Laboratorio de Tecnologías Sustentables de la División de CBI.